Esfuerzo

Como dije en mi post de presentación, empiezo este año con energía y sentimiento de compromiso, dispuesto a dar un giro a mi vida, una suma de pequeños pasos, que supongan un gran paso personal. Y ese primer pasito, es este blog.

Por eso, de nuevo aquí, cuando no han pasado ni 48 horas de mi estreno. De corazón, me gustaría mantener esta frecuencia creativa lo máximo posible, alegraros muchas mañanas, llenar de luz días oscuros, ser la inspiración de miles de jovenes sin rumbo, pero no puedo prometerlo. Lo intentaré, pero ya os digo que me va a costar esfuerzo.

Sí, queridos amigos y aún más queridos desconocidos, las cosas me cuestan.

Me cuesta levantarme a las 8.05 para ir a trabajar (sé que mucha gente se levanta muchísimo antes, para todos ellos mi admiración), me cuesta ducharme todos los días a las 8.11, especialmente en invierno (sé que toda esa gente que se levanta muchísimo antes, también se ducha, admiración doble), me cuesta ir de lunes a viernes a trabajar (aunque gracias a la eficaz y competente gestión de nuestros políticos, trabajar ahora mismo no es una obligación, es un privilegio. Mi abrazo más cálido a todos los que quisieran hacerlo y no pueden), me cuesta salir los fines de semana a buscar mujeres, sabiendo que ellas no me están buscando a mí, me cuesta escribir y representar monólogos (una parte del público piensa que eso de decir tonterías durante 30 minutos no tiene merito, ellos son capaces de hacerlo durante horas después del tercer Gin-Tonic. Tienen razón, pero es que yo solamente bebo dos, y con fines digestivos).

¿Esta actitud está motivada por un problema de dejadez, vagancia, apatía, falta de ilusión o de sangre en la venas?. Mi familia, amigos y la gente a la que aprecio, piensan que SÍ, aunque no coinciden en el factor (la mayoría cree que es una suma de todos).

Pero se equivocan, no es culpa mía, sino de Adan y Eva.

Como católico convencido (convencido nada más de ser católico, pero con dudillas del resto), creo en la Biblia y gracias a mi educación religiosa (exámenes tipo test de las Sagradas Escrituras en Religión), tengo cierto conocimiento del texto, suficiente para saber que si no hubiera sido por ellos, ahora viviríamos de lujo. Admito mis pecadillos personales, en materia de lujuria (35 años, soltero y casi entero, soy católico, no un santo varón), gula (si no lo remedio, en 10 años seré un "señor con tripa"), fortaleza, mentira ..., pero lo que no estoy dispuesto es a cargar con el Pecado Original.

La manzana se la comieron ellos, no yo. Es a ellos a los que el Señor dijo "ganarás el pan con el sudor de tu frente". Vale, correcto, la cagaron, que apechugen, pero ¿por qué ese "y esto recaerá sobre vuestros hijos, los hijos ve vuestros hijos y los hijos de los hijos ...", en plan Hipoteca?. ¿Era necesario?. Ya nos hubieran parecido un rollo simplemente con que se hubieran comportado como unos padres normales, "Limpia el Paraiso que no es una pocilga", "No comas del arbol prohibido que te sienta mal", "No forniques con tu hermana aunque sea la única mujer de la Creación, para eso están las cabras".

Y lo peor de todo, es que hicieron justo lo contrario de lo que nos dicen siempre, "si cometes un error, da la cara, no busques excusas". Pues ellos inventaron la primera excusa de la Historia: "no Señor, si yo no quería, fue la serpiente que me lió, que si dale un mordisquito, que verás que bien, que te va a gustar" y Adán siguió en la misma línea "no Señor, si yo no quería, que fue Eva, que me lió, que si  luego te doy un mordisquito, que verás que bien, que te va a gustar".

En resumen, que si no fuera por ellos, ahora viviríamos en la gloria (terrenal claro), sin trabajar, sin sudar, comiendo de todo sin engordar, desnudos, con toda la eternidad para hacer nada (no voy a seguir porque empiezo a babear con solo imaginarlo), en vez de esta infelicidad permanente.

Así que, la próxima vez que alguien os suelte un rollo sobre la responsabilidad, el trabajo y el esfuerzo, decidle que es culpa de la serpiente.